Empezamos soñando, como lo hacemos todos cuando damos rienda suelta a crear y a experimentar el deseo de emprender.
Inicialmente pensamos que venderíamos solo velas, pero cuando nos permitimos soñar e imaginar sin límite, entendimos que no queríamos vender solo una vela, sino que en esencia queríamos brindar bienestar, entregar a nuestros clientes una experiencia olfativa, llena de calma y armonía.
Fue así como un proyecto familiar tomo fuerza y se convirtió en Onírica Velas, apoyándonos en nuestra pasión por la luz, los aromas y el bienestar, pusimos nuestro amor en cada creación, inspirados en los cuatro elementos empezamos a incluir detalles en cada vela y posteriormente en nuevos productos como las brumas, los aceites y los jabones.
Desde el 2021 cuando inició esta aventura, no hemos parado de pensar en cómo mejorar nuestros productos, como hacer vivir cada día una mejor experiencia a los que nos conocen, como ser excepcionales en el servicio y la atención que prestamos y sobre todo como lograr cada vez más que Onírica ilumine y nutra de paz y armonía los hogares.